27 Sep LIBRETAS SOLIDARIAS/CHILE
Como ha pasado en tantos de nuestros contextos, la pandemia ha golpeado fuerte no solo en la salud, sino en muchas otras áreas de la vida de personas y familias. En el barrio donde estamos, en la comuna de Cerro Navia, periferia de Santiago, la cesantía (paro por despidos laborales) y la imposibilidad de trabajar (trabajos informales o más precarios que no contaban con permisos de desplazamiento en cuarentena) trajeron enormes consecuencias, que evidenciaron todavía más la profunda inequidad que las manifestaciones sociales venían denunciando explosivamente desde octubre pasado en Chile.
En nuestro colegio recibimos cada mes, desde abril, alguna ayuda de alimentos dirigida a las y los estudiantes inscritos en el Programa de Alimentación Escolar, que se repartió con prontitud, procurando “multiplicarla” para sus destinatarios. Aun así, ¡se hacía tan poca! Llegaban al colegio mamás o papás que pedían ayuda, compartiendo su desesperación por no tener dónde recurrir para conseguir alimentos para sus familias. A través de algun@s profesores nos enterábamos de otras situaciones de dolorosa necesidad.
Durante el mes de mayo, una profesora del colegio llegó con una donación equivalente a poco más de 800 euros. Había hecho campaña entre sus contactos, pensando en las familias del colegio. Casi al mismo tiempo, un amigo de la comunidad nos hizo llegar casi 500 euros con el mismo fin. Con esa base, nos atrevimos a darle forma a un proyecto que nos rondaba y que ya se hacía en otros lugares del país: se entrega a la familia una “libreta solidaria” equivalente a un monto de dinero con el que podían comprar lo que necesitaran en un almacén cercano. De este modo, se beneficiaba no solo a la familia, sino al almacén (es decir, ¡a otra familia del mismo barrio!), fortaleciendo una economía circular y local.
Todo el equipo pastoral del colegio se implicó en la tarea, adaptando la experiencia a nuestra realidad, procurando implementar un sistema de ayuda solidaria, sustentable y virtuoso. Así:
- Contactamos con almacenes de familias de nuestra comunidad educativa o cercanas al colegio que se quieran sumar a este proyecto.
- Cada mes elaboramos la lista de familias beneficiadas, contando para eso con la información de las y los profesores y otras personas, el conocimiento previo de la realidad de las familias del colegio, etc. Se da especial importancia al criterio de ser familias migrantes o pertenecientes a pueblos originarios, expresando con eso las opciones de la Planificación de la Viceprovincia.
- A cada familia se asigna un monto de acuerdo al número de integrantes, de alrededor de 50 a 55 euros. Las familias se distribuyen entre los almacenes comprometidos con el proyecto.
- La familia tiene libertad para adquirir los productos que estime convenientes, dentro del monto asignado, a lo largo del mes. En el equipo nos repartimos para hacer el seguimiento de las familias y solucionar posibles dificultades.
- El dinero se entrega directamente a las y los almaceneros, a fin de mes.
Durante el mes de junio se preparó todo lo necesario. En julio se hizo el programa piloto con 27 familias. ¡Fue una muy buena experiencia! A fin de mes comenzamos a recaudar fondos entre nuestros contactos, para poder sostener en el tiempo el proyecto. La respuesta fue tan generosa, que en agosto pudimos aumentar a 50 y en septiembre a 80 las familias beneficiadas. Recibimos también un aporte de parte de la H. Rosario, superiora general. Y ese amigo que donó al comienzo sigue apoyando… También hemos sido testigos de la conmovedora generosidad de algunas familias: “Hermana, nosotros no estamos tan mal este mes, désela a otra familia…”. Una mamá, a la que se había ayudado durante dos meses y que pudo cobrar un dinero de su pensión, llegó a hacer un aporte para “devolver la mano” y que otra familia pudiera recibir una Libreta.
Seguimos poniendo lo mejor de nosotr@s en este proyecto, aun sabiendo que es apenas un poco de ayuda en medio de una gran necesidad, que sigue creciendo. Pero ha tenido gusto a Reino…
Aquí las imágenes, para que puedan ver más de cerca: (video)
Mar Sáenz, aci
