SANTA RAFAELA MARÍA ESTÁ FELIZ. Roma, su casa

SANTA RAFAELA MARÍA ESTÁ FELIZ. Roma, su casa

Santa Rafaela María debía estar muy feliz viendo a sus amadas hijas preparar su fiesta con mucha alegría y gratitud, atendiendo hasta el más mínimo detalle. Ha sido una ocasión muy especial para las Terceronas, que celebramos por primera vez su fiesta tan cerca de ella, con mucha ilusión. Recordamos sus palabras en nuestro corazón “todas unidos en todo como los dedos de la mano”. 

Para mí, ha sido una oportunidad increíble y especial tomar parte en la decoración de su capilla. Me sentí muy afortunada de poder conectar de corazón a corazón, a solas con ella, mientras estaba arreglando las flores. Me habló con su sonrisa y su cariño, le miré y me atrapó su sencillez y su amor.

Las primeras vísperas fueron en la capilla de la comunidad, llevó una vela un chico de 5 años acompañado por su madre ¡contentísimo! y la puso en la estatua de la Santa para empezar la celebración, mientras las hermanas cantábamos el himno dedicado a ella. 

El día 18 de mayo, en Laudes, rezamos todas con nuestra Madre, frente a su cuerpo. Quisimos compartir nuestra alegría con la Santa a través de la oración y los cantos. Después, continuamos con la adoración del Santísimo, que se expuso sobre el altar que yo había preparado con flores. Fue muy especial ver a Santa Rafaela con el Santísimo tan cerca de ella. Me quedé asombrada al contemplar su cuerpo ofreciéndose como un altar precioso para Jesús. Vi a muchas personas que vinieron a visitarla y a agradecer el ejemplo de su extraordinaria vida.

Compartimos la alegría de la fiesta de Santa Rafaela María con la gente, en el comedor de Caritas. La Hermana Millet, que nos acompaña al apostolado, introdujo el motivo de nuestra fiesta y guió la oración con los voluntarios. También les compartimos dulces a todas las personas que comieron allí, e incluso a los voluntarios, junto a unas tarjetas con la oración de Santa Rafaela María. Fue un modo muy significativo de transmitir nuestra alegría.

La adoración por la tarde comenzó a las cuatro y continúo hasta antes de la Eucaristía, a las 6:30. Mucha gente conocida llegó muy pronto, formándose un ambiente de fiesta. Celebramos una Eucaristía preciosa, con la participación de diferentes grupos de la familia ACI, amigos muy queridos de nuestras Hermanas, las Hermanas de Torricella, las de Castelverde y algunas otras que estaban circunstancialmente en Roma este día. Un grupo Filipino tocó y cantó el Gloria, de manera espectacular, en Tagalog; hubo otras canciones en español, inglés e italiano; un ofertorio especial, preparado por las Hermanas de la enfermería y un ritual de India llamado “Arati”. Así, pudimos sentir “un corazón universal” latiendo en su iglesia y encarnando una gran familia.

 Después de la Eucaristía, nos encontramos todos en una sala grande dónde continuamos celebrando con comida y bebida. La sala se llenó de conversaciones amistosas y alegres, brindamos agradecidamente por Santa Rafaela María, que nos une en su Fiesta. Seguimos su camino con ese corazón universal, del que sigue brotando la esperanza. El corazón de Jesús, en el que Santa Rafaela María confío ciegamente.

Santa Rafaela María, ruega por nosotros.

Anna Thanh Thao, ACI